Algo más que una
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Fotografía de familia naturales, que invita y deja libre.
Creemos en las imágenes que hablan de ti y de tu familia tal y como es; de modo que si eres libre y con la mente abierta, te mostrarás junto a los tuyos de una manera preciosa, imperfecta, muy real.
A la hora de fotografiar, creamos un espacio para que ocurran cosas imprevisibles y eso es algo más interesante, pensamos, que si tratamos de controlar o forzar todo.
Por ello, está bien dejarse llevar; ya vendrán las miradas, ya vendrán las sonrisas y los brincos.
En otras palabras, en nuestras sesiones de familia, intentamos hacer que te sientas bien, porque al final del día, lo que queremos es que veas las fotografías y reconozcas a tus seres queridos siendo ellos mismos, con la naturalidad y esencia que cada persona trae al mundo.
El fotógrafo canadiense, Chris Orwig, es un referente para nosotros. Te dejo algunas de sus palabras, las cuáles suscribimos.
“Los padres y madres saben que el tiempo no se puede detener. Así que la paternidad y maternidad no tiene que ver con detener o capturar. En lugar de eso, el objetivo de la familia es forjar a individuos conectados e independientes a la vez. Una buena fotografía de familia requiere un enfoque que no imponga si no que invite y deje libre”.
Sesión de fotos familiar de estilo de vida natural
La combinación perfecta de retratos familiares y fotografías divertidas naturales de estilo de vida puro. Se trata de mezclar algunos retratos familiares al aire libre con tiempo de juego y divertirse tanto como sea posible. Dejamos atrás el estudio, salimos y nos divertimos.
Y es que nos gustaría que la fotografía de tu familia sea lo más honesta y auténtica posible. Como fotógrafos de familia natural, que reflejan la naturalidad, creemos que no podemos dejar que esos recuerdos fugaces y efímeros de la infancia, se desvanezcan.
Retratos familiares
Uno de nuestros hobbies favoritos es ver fotos de familia con los que más queremos y apreciamos. Es una especie de nostalgia sana por un tiempo que ya ha pasado; un refugio en el que se encuentra el mismo amor y la ternura hacia los tuyos, y al que siempre está bien volver.
El sol pinta los tonos de mi camino
